Calabacines y lechugas fueron nuestros primeros frutos.
Continuaron las berenjenas, pimientos, pepinos, y ya lo tomates...
Siempre con la inestimable ayuda de la familia y amigos..
ya sea cosechando, sembrando o bromeando... todo vale y ayuda a crear este espacio y tiempo de abundancia...
Y esto es lo que llega a la cocina, a varias cocinas, porque da para compartir...
Gracias al Universo por esta abundancia!!!
que guapete el del pelo larguete!!!
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